lunes, 8 de septiembre de 2014

Restaurando un Sombrero




El verano pasado, mientras guardaba unas sábanas en el armario de Abuelita, encontré un sombrero de paja que estaba bastante atrotinado. Tenía una cinta de color rojo que con letras blancas publicitaba la Fiesta Mayor del pueblo del 2010. Yo había perdido mi pamela veraniega y me pareció una buena opción, así que como nadie lo quería me lo quedé una vez solicitados los permisos pertinentes.

Cuando llegué al pueblo este verano, comprobé que el año pasado ya le había quitado la cinta para restaurarlo, pero que no había avanzado mucho más. Estuve pensando como hacerlo: una cinta violeta... una cinta negra... una cinta estampada... Nada me agradaba demasiado. Mariposilla iba dando ideas: "De colores mami, que así te combina con toda tu ropa". Al final, mirando el bolso de Mariposilla y comprobando la cantidad de colores de hilo de ganchillo que acumulábamos en casa, me dispuse a hacer una cinta a base de flores.



Esta flor es muy, muy sencilla. En internet podéis encontrar muchos tutoriales en el que os explican muy facilmente como hacer florecitas de este tipo. Existe una gran variedad de formas, y la mayoría de ellas fáciles aunque seáis novatas con el hilo. Os dejo un enlace que he encontrado en el que han colgado no sólo fotos sino también vídeos de como hacer algunas de ella. Sólo tenéis que clicar aquí.

Una vez listas las flores, he restaurado un poco el sombrero. He recordado los trozos rotos y estropeados que sobresalían, lo he limpiado y por último le he echado laca de Abuelita para que quede firme.



Una vez el sombrero listo, he cosido las flores siguiendo la serie que me gustaba. Y finalmente he conseguido un sombrero personalizado que me ha ido estupéndamente bien para soportar mejor esos días calurosos de este verano. ¿Qué os parece? 







Gracias por compartir sus ideas a espaciohogar.com/flores-ganchillocomo-se-hacen/

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Mermelada Casera, hoy de Sandía





Hace un tiempo encontré un libro bastante antiguo que hablaba de las recetas tradicionales valencianas. Me llamó la atención porque estaba escrito por autoras de la tierra y recogían maneras de obrar bastante antiguas. Hace unos días, por casualidad, en un blog encontré una referencia a ese mismo libro mientras explicaba cómo hacer dulce de sandía, un postre parecido al dulce de membrillo. 

Le comenté a abuelita esta casualidad y le expliqué que me resultaba curioso que se usara la corteza de la sandía para hacerlo. Ella, que tiene sangre valenciana, recordó que la mermelada de sandía también se elaboraba con la piel. En esa época, se tenía que aprovechar tanto como se podía lo que tenían en casa. Lamentablemente, reflexionaba Abuelita, estos tiempos en los que vivimos ahora también nos hacen buscar alternativas que nos permitan ahorrar. Y ni cortas ni perezosas, ese mismo día, empezamos a guardar la cáscara para hacer mermelada.
Más concretamente, lo que hemos hecho nosotras en casa darle uso a la corteza quitando la parte verde, dejando la blanca y un dedo de pulpa roja. Os dejo una imagen para que lo veáis mejor.


Hemos ido guardando poco a poco los trozos cortados a dados. Cuando hemos tenido 1 Kgr lo hemos descongelado todo. Una vez descongelada la sandía, le añadimos 600gr de azúcar y lo dejamos macerar un par de horas.


A continuación, ponemos a cocer la mezcla y la dejamos hervir unos 20 minutos, momento en el que añadimos el zumo de medio limón. En la foto podéis ver como Mariposilla lo hecha con cuidado mientras está hirviendo la sandía.


Dejamos cocer aproximadamente una hora más. Iremos removiendo para controlar el punto de cocción.

Cuando lo tengamos listo, lo retiraremos del fuego y esperaremos a que enfríe para triturar.



El resto ya sabéis como hacerlo: lo envasamos y si no lo vamos a usar en los próximos 3 meses, le hacemos el vacío para que nos dure hasta 3 años.

Espero que os guste y que la hagáis antes de que termine el verano. Os indico que he hecho diferentes pruebas de azúcar para que no quede demasiado dulce, y la que os expongo es la que a mi me gusta más. También he dejado más pulpa roja que le da más sabor a sandía y un color más rojizo. Contra más azúcar pongáis, más se parecerá la mezcla a la melaza.

lunes, 1 de septiembre de 2014

Bolso de Ganchillo





El otro día, mi vecina S me hizo llegar un artículo publicado en un periódico digital en el que destacaban el aumento de jóvenes que confeccionaban sus propios complementos a calceta. Se mencionaba el ensayo The Relaxation Response, del profesor de medicina en Harvard, Herbert Benson, en el que recomienda la calcetoterapia para combatir distintos problemas de salud, desde los dolores crónicos hasta la hipertensión y el insomnio. Sin embargo, sus saludables beneficios van más allá, matizaba el artículo, pues según un estudio médico realizado por investigadores de la Universidad de Chicago, la práctica de calceta es uno de los remedios más eficaces para dejar de fumar. Un fenómeno que ya ha inspirado novelas como El club de la calceta (Algaida) de la escritora María Reimóndez.

En ese momento, estaba yo haciéndole a Mariposilla un bolso que habíamos diseñado juntas. Un bolso a ganchillo que es muy fácil de hacer y muy original. Os invito a que comprobéis que si necesitáis relajación, concentración, distracción… la calceta es una divertida herramienta para combatir el estrés, incluso cuando se está aprendiendo. 


En primer lugar he tejido unas 10 flores a ganchillo. El diseño que he elegido es el de la flor africana, porque me parece muy chula y original. Hay un montón de patrones por Internet, pero si no sabéis mucho, os aconsejo que busquéis en Youtube. Allí hallaréis un sinfín de tutoriales que van explicando el proceso paso a paso. Si sabéis hacer otro tipo de flor, también os quedará un bolso muy chulo. Estas son las mías. Perdonad la calidad de la foto, pero sólo tenía el teléfono móvil a mano.


Una vez terminadas las 10 flores, las cosemos entre ellas formado una tira uniforme donde queden todas intercaladas.


Cerramos la tira para que quede un tubo. Este es el centro de nuestro bolsito.


A continuación, para darle más cuerpo añadí unas pasadas al tuvo en la que iba a ser la parte inferior del bolso. Tejí una pasada en punto bajo de color rosa clarito, una pasada en punto bajo de color lila y una doble pasada también a punto bajo de color fucsia. También tejí la tapa del bolso haciendo una esfera porque quería que el bolsito de Mariposilla fuera redondo.


Luego uní las dos partes con el mismo ganchillo, pero si os es complicado también se puede coser con una aguja de lana. Recordad hacerlo por la parte que va a quedar dentro del bolso, así quedará la costura más bonita.
 

En la parte superior hice lo mismo, una doble pasada a punto bajo de color rosa clarito, una doble pasada de color lila, y en fucsia doble punto alto con dos hebras para hacer una superficie con huecos en los que poner la cinta para cerrar el saquito. Para rematar el trabajo, he usado hilo lila a punto cangrejo.


Ya por ultimo tejí el asa del bolsito. Lo hice de color lila porque ya estaba empachada de rosa, y usé el punto alto. De esta manera, al ser una parte visible, la tira es igual por ambos costados.


Se cose el asa al saquito y ya sólo nos queda poner la cinta para cerrar el bolso. Yo he usado cordón de zapatos de color rosa que tenía por casa de algunas deportivas de Mariposilla. Luego he cortado los herretes (las puntas plastificadas de los cordones) y he hecho un nudo.


Este es el resultado final. Mariposilla está encantada con su bolsito, y ya me ha pedido uno de lana para invierno.


¿Os animáis a hacer uno vosotros? Por si no os lo he dicho nunca, podéis preguntarme lo que queráis, dudas por no haber explicado bien alguno de los temas, hacerme llegar alternativas a mi manera de hacer las cosas escribiéndome comentarios... Será para mí un placer que participéis.
 
Os dejo también linkado el artículo que os comentaba al principio de la entrada por si sentís curiosidad:

jueves, 7 de agosto de 2014

Mermelada Casera, hoy de Cereza


Los martes por la mañana vienen al pueblo varios payeses que ponen sus paraditas en la plaza. El festival de colores es precioso, y el de olores más. Los que vivimos en una gran ciudad sabemos que los tomates no huelen a nada y saben peor, y que los melocotones están acartonados. Pero cuando estás cerca de estas paraditas, huele a huerto. A fruta y verdura de la de verdad.

Este pasado martes, Abuelita fue en busca de la compra de la semana: sandía, melón, unos pimientos, tomates, ciruelas... Y encontró lo que a ella le gusta encontrar: el payés que vende por cajas porque la fruta está muy madura. Llegó tan contenta con su caja de cerezas maduras a casa, que no tardó ni dos minutos en empezar a hacer selección. Una parte sería para comer estos días y las más maduras se convertirían en mermelada para el resto del año.

Lo primero que hicimos fue lavar bien las cerezas, sacarles el rabito y deshuesarlas. Hay mucha gente que las cuece con los huesos y los extrae después, pero nosotras lo hacemos siempre así porque es la manera tradicional. Además, tiene un truquito que luego os explicaré.


Les echamos el azúcar para que maceren un poco. En este caso, las cerezas son muy dulces, por lo que no usamos la misma proporción que con el melocotón. Pesamos 1 Kgr de cereza ya limpia, y le añadimos 800 gr de azúcar. Si pusiéramos más, se perdería el dulzor de la fruta.


Los huesos no los desechamos. Hacemos unos saquitos con los huesos dentro (nosotros usamos gasas porque el tejido ha de permitir dejar sudar a los huesos), que cerraremos bien para que hiervan luego con la mezcla. Este es el truco de nuestra mermelada: cocer la fruta con el hueso aparte dentro de la olla hace que se refuerce el sabor.


Cuando la vayamos a hervir, añadimos la mitad de una manzana con piel. ¿Por qué? Pues por la pectina. Os explico. 

La pectina es una sustancia natural, de consistencia gomosa, que se encuentra generalmente en la piel de la fruta. Cuando cocemos fruta, los ácidos de la misma fruta extraen la pectina y cuando se añade el azúcar es cuando se produce la coagulación en la mezcla. Algunas frutas, como las fresas y las cerezas, contienen muy poca pectina y para que cuajasen se tendría que cocer tanto que: se perdería el color, se perdería el sabor, y apenas nos quedaría fruta en la cazuela. Cuando añadimos pectina evitamos estas tres posibilidades y no se pierden propiedades. Nosotras intentamos evitar la pectina artificial, por lo que usamos como sustituta la manzana, que es la fruta que más pectina tiene. De esta manera, añadiendo media manzana conseguimos espesar la mermelada sin que se note el sabor y sin añadir ningún ingrediente artificial. He leído, pero no lo he probado nunca, que el zumo de limón tiene las mismas características que la manzana.


Dejamos hervir la mezcla una hora más o menos Al acabar la cocción desechamos la manzana y las bolsitas con los huesos. Como hemos añadido los huesos a la mezcla, no se notará nada el sabor de la manzana y al haberlo hecho en saquitos, no tendremos que pescarlos luego uno a uno con la espumadera. En el caso que os guste encontraros los trozos de cereza en la mermelada, podréis envasarla ya. Si por el contrario os gustan las texturas finas, pasadla por la batidora para conseguir la uniformidad que queráis y luego envasadla.


¿Y bien? Aún queda cereza, aunque ya se está acabando la temporada. Si queréis como nosotras degustar una buena mermelada casera de cerezas sacada de vuestra despensa el mes de enero, ponedla al baño maría como os enseñé en la elaboración de la mermelada de melocotón y disfrutadla todo el año. Yo voy a preparar un botecito para llevármelo a la ciudad, que a Mariposilla es la mermelada que más le gusta.


martes, 5 de agosto de 2014

Bola de nieve con Purpurina



Hace ya unos días que Mariposilla y yo estamos en el pueblo. Nuestro abanico de actividades es un no parar: hacemos deberes, estamos aprendiendo a patinar, vamos a bucear con las gafas nuevas de tubo de color rosa... Entre tanto ajetreo, intentamos mantener nuestra costumbre de tener la cabeza ocupada, ya sea leyendo o pensando en alguna manualidad para hacer. El problema que tenemos, como en la mayoría de pueblos, es la conexión a Internet para compartir con vosotros nuestras nuevas ideas.

Hoy es el Santo de Abuelita. Imagino que mucha gente no celebra su Santo, pero en casa tenemos por costumbre seguir ese refrán de "las desgracias vienen solas" y celebramos todo lo que se puede celebrar. Para seguir con nuestra costumbre de hacer regalos personales, ayer por la tarde Mariposilla se puso a pensar que le regalaría a Abuelita. Y decidió hacer una Bola de Nieve, como las que se hacen para Navidad, pero con un osito que compramos hace unos días en un bazar oriental (vosotros ya me entendéis) y purpurina que encontró en nuestra caja de las manualidades.



Es muy fácil de hacer, sólo hay que tener cuidado con los peques en el momento de poner el pegamento. Un consejo que os doy, es que recicléis las figuritas que salen en los huevos de chocolate, pues no requiere un bote muy grande y quedan bastante chulas para regalar a algún amiguito.

Vamos al tema. Necesitaremos: una figura, agua destilada (la nuestra es agua de la secadora), un bote de vidrio (de esos en los que vienen los pepinillos o las aceitunas), purpurina y pegamento de impacto.



Empezaremos pegando a la tapa del bote de vidrio el muñequito que queremos usar. 



Mientras tanto llenamos el bote de cristal con el agua destilada (o mitad destilada mitad del grifo). Lo llenaremos del todo. Cuando se haya secado el pegamento (en 2 minutitos está), metemos la tapa con el muñeco pegado en el bote (como si lo cerráramos) dejando que salga el agua sobrante y desechando un chorrito extra para que no quede lleno del todo. 

Con la medida de agua tomada, sacamos el muñequito con la tapa y ponemos dentro del agua purpurina. Poned la que queráis del color que queráis. Como podréis ver en la fotografía, Mariposilla se excedió un poco en la cantidad, pero es que a ella le encantan los brillos. Se podría llamar perfectamente Mariposilla y de apellido Purpurina.


Removemos la mezcla de agua con purpurina usando una cuchara para que se vayan integrando los dos elementos. Si se pone mucha purpurina puede ser que os quede algún grumito.


Finalmente, usamos de nuevo el pegamento para que la tapa del bote quede bien fijada al cristal. Así evitaremos que se pueda abrir.



Por último, lo que normalmente hacemos nosotras es poner un lazo o un trozo de papel para que disimule la tapa y no se note tanto que es un bote de cristal. En esta ocasión, hemos pegado una cinta de raso y encima hemos colocado un papel con la inscripción que ha querido Mariposilla "Te Quiero Abuela".


Podéis ver que es fácil y muy divertido para los pequeñajos. Abuelita está encantada con su regalo y lo ha colocado en un lugar privilegiado del comedor. Vosotros también podéis aprovechar algún botecito pequeño de anchoas que tengáis y uno de esos muñequitos que nunca sabes donde guardar para hacer un regalito. 

Para Navidad os enseñaré a hacer otro estilo de Bolas de Nieve para decorar la casa para fiestas o para que los pequeñajos de casa (y los no tan pequeñajos) puedan regalar a sus amigos y familiares.


martes, 8 de julio de 2014

Mermelada Casera, hoy de Melocotón



Este pasado fin de semana, me acerqué al pueblo a ver a Abuelita. Al entrar en casa encontré una cesta llena de melocotones. Eran de esos pequeños pero muy dulces. Abuelita me comentó que había llevado a mis tíos al mercado de un pueblo cercano donde un payés vendía estos melocotones a muy buen precio. Aunque en casa empezamos a hacer mermelada casera a finales de julio, esos melocotones eran perfectos para empezar ya a hacer conserva.

Los ingredientes para hacer mermelada de melocotón son simplemente dos: melocotones y azúcar. Sólo tenéis que calcular el mismo peso de melocotón y de azúcar, es decir, 1 kgr de melocotones por 1 kgr de azúcar. La fruta para confituras y mermeladas, por lo menos nosotros, la pesamos ya pelada y cortada.

Lo primero que hacemos es pelar el melocotón y cortarlo en trozos. Lo pesamos y ponemos la misma proporción de fruta que de azúcar en un bol. Lo dejamos unas horas hasta que el azúcar se haya hecho líquida. Una vez esté listo, se pone a cocer a fuego fuerte unos 20-25 minutos (cuando empecéis a notar que va espesando para coger textura es que ya está en su punto). Lo vamos removiendo de vez en cuando para que no se pegue al fondo.

Una vez sacada la mezcla del fuego, lo dejamos reposar y enfríar un poco. A nosotras nos gusta que la mermelada sea fina, así que la trituramos con la batidora y la ponemos en botes de cristal bien limpios. Si os gusta con trozos de melocotón, sólo tenéis que triturarla menos. ¡Lo bueno de la mermelada casera es que la podéis hacer totalmente a vuestro gusto!

La mermelada la ponemos que aún esté un poco caliente dentro de botes de cristal. Es más fácil de manejar. Pero no debemos taparlos hasta que no esté fría. Los botes los podéis reciclar de conservas que hayáis comprado antes, como garbanzos cocidos o aceitunas.


Cuando la mermelada de los botes se ha enfriado, los tapamos y procedemos a hacer el vacío. La mermelada sin estar puesta al vacío puede durar unos tres meses, pero con este proceso podemos tener mermelada para todo el año. Para ello, en una olla grande colocaremos los botes de cristal cubiertos por agua y lo pondremos en el fuego. Una vez empice a hervir, calculamos unos 20 minutos para que se haga el vacío.


Después, con el bote de mermelada bien limpio y ya al vacío lo ponemos bonito. En el caso de Abuelita, a ella le gusta poner una telita para que no se vea la tapa, y a mi me gusta poner una etiqueta donde figure la fecha. Como ejemplo, os dejo este que hemos preparado para regalárselo a nuestra amiga M y a sus niñas.


Si queréis saber más sobre mermeladas, seguid el blog. Próximamente veréis como hacer la de melón y la de cerezas.





viernes, 4 de julio de 2014

Maquetas 3D en Cartón de Star Wars


Se acercan las vacaciones, y con ellas las listas interminables de cosas que queremos hacer para que no se nos olvide incluirlas en las maletas. En el caso de Mariposilla, es totalmente innegociable ver la saga completa de Star Wars. Se ha convertido en una tradición veraniega para esas noches tan calurosas en las que es imposible conciliar el sueño. Junto con su biquini y las gafas de buceo, es imprescindible el pack con los 6 DVD para pasar unas buenas vacaciones. 

Hace unos días Mariposilla, que es una gran fan de R2D2, además de la Princesa Leya y de Darth Vader, me pidió una maqueta de este androide tan encantador. Y venga a pensar y buscar me topé con el desplegable de R2D2 en 3D. Se trata de unos recortables que podreis imprimir vosotros mismos ya que os los podéis descargar en PDF.


No contenta con esto, he seguido rebuscando, y he encontrado también el del Halcón Milenario!!!


Y finalmente, he topado con maquetas de un AT-AT y de diversas naves. En este punto, deciros que cuando las imprimáis lo hagáis en papel un poco grueso (en plan cartulina) para que tenga una cierta consistencia al montarlo, pero al mismo tiempo sea lo bastante fácil de manejar para que no nos cueste doblar las pestañas.


Es algo entretenido, para que os voy a engañar, pero es muy divertido. ¿Os acordáis cuando de pequeños teníamos que hacer muñequitos cortando papel y doblando pestañitas de cartón? Pues esta es exactamente la idea. Para niños de la edad de Mariposilla es un poco complejo, pero considero que si os gusta esta saga y a vuestros padawan también, se trata de una manualidad perfecta para hacer en familia. A poco que a los peques les guste alguna de las películas de Star Wars estarán encantados de compartir su tiempo con vosotros para conseguir su muñequito o su nave.

Por otro lado, podéis encontrar también unos cubos muy interesantes que son mucho más fáciles de montar y que pueden hacer los peques solos. Es lo que se conoce como CUBEECRAFT. Mariposilla ha elegido a R2D2 y a C3PO, pero en internet hayaréis un sinfín de ellos: desde toda la saga de Star Wars, hasta a Hello Kitty, superheroes, Mario Bros, Pokemon... Sólo tenéis que hacer la búsqueda escribiendo "cubeecraft" antes del nombre del personaje. Los nuestros se los hemos regalado a M para que lo ponga en su despacho.


Así que animaros y descargaros los desplegables en estos enlaces o buscad los cubos que más os gusten. ¡Qué la fuerza os acompañe!.





Via: manualidadesaraudales.com